Carlos Payán Velver dona su biblioteca al pueblo de Tlalpan
Unos 6 mil ejemplares se podrán consultar en la Casa Virrey de Mendoza, ubicada en esa demarcación
Héctor Díaz-Polanco, amigo del director fundador de La Jornada, aportará 2 mil libros al acervo
Haber participado en todas las pequeñas utopías
es motivo de orgullo, dice
Carlos Payán Velver (al centro), acompañado de Héctor Díaz-Polanco, así
como de Consuelo Sánchez, Azul Morris, Giovanna Valenti, Gisela
González e Ilse Gradwohl, integrantes del Grupo Tequio, ayer, en la Casa
Virrey de Mendoza, en Tlalpan, donde se firmó el convenio de
colaboración entre esa asociación civil y la Secretaría de Cultura del
Gobierno del Distrito Federal. Foto Carlos Ramos Mamahua.
Mónica Mateos-Vega y Gabriela Romero
Periódico La Jornada
Miércoles 12 de febrero de 2014.
Miércoles 12 de febrero de 2014.
El periodista y director fundador de La Jornada,
Carlos Payán Velver, dona su biblioteca personal al pueblo de Tlalpan.
El acervo, conformado por alrededor de 6 mil ejemplares, se ubicará en
breve en la Casa del Virrey de Mendoza, inmueble que un grupo de vecinos
de la zona ayudó a rescatar de ser derrumbado para construir en el
predio de 9 mil metros cuadrados un condominio horizontal.
Ayer se firmó un convenio de colaboración entre los ciudadanos que
integran la asociación civil Grupo Tequio (presidida por Payán) y la
Secretaría de Educación del Gobierno del Distrito Federal (GDF),
instancia que aportó un millón de pesos para la adecuación del área que
albergará la biblioteca del periodista.
Los recursos también se utilizarán en la rehabilitación del amplio jardín que aloja la casa, el cual estará abierto al público de manera gratuita.
Fue así como la edificación fue sometida a trabajos de rehabilitación y con ello se recuperó su belleza arquitectónica. La siguiente etapa es adecuar instalaciones para recibir la biblioteca Payán.
Acerca de sus libros comentó que son
El antropólogo Héctor Díaz-Polanco, también vecino de Tlalpan, apuntó que aportará otros 2 mil ejemplares para fortalecer el acervo de su amigo, sobre todo en el área de las ciencias sociales, ya que la biblioteca del periodista es básicamente de historia, literatura y arte.
Los recursos también se utilizarán en la rehabilitación del amplio jardín que aloja la casa, el cual estará abierto al público de manera gratuita.
Se construirá un huerto de puertas abiertas para que lo disfruten ancianos, niños, jóvenes, todos, explicó Payán.
Defensa del patrimonio histórico
El Grupo Tequio posee en comodato la Casa del Virrey de
Mendoza desde 2012, luego de que el GDF expropió el predio. Ahí, además
de llevar a cabo exposiciones y otros actos culturales, cuentan con
oficinas desde donde se dedican a apoyar la defensa del patrimonio
histórico de Tlalpan y del país.
Cuando las autoridades capitalinas les cedieron el inmueble, Carlos Payán les dijo: Si no convertimos el jardín en un espacio público, me da vergüenza que lo tengamos, no puede ser. Pero no me hagan andar pidiendo por todas partes dinero cuando esto pertenece al gobierno de la ciudad, la responsabilidad es de todos.
Fue así como la edificación fue sometida a trabajos de rehabilitación y con ello se recuperó su belleza arquitectónica. La siguiente etapa es adecuar instalaciones para recibir la biblioteca Payán.
Esto no hubiera sido posible sin estas mujeres luchadoras, fuertes e incorruptibles, dijo el periodista refiriéndose a las vecinas que colaboraron con él y otras personas, sin desfallecer, no obstante las amenazas de muerte que recibieron entonces.
He aprendido a trabajar con la gente. El resultado es que lo que hace uno se torna colectivo. La línea es la de los amigos que tenemos una afinidad política hacia la izquierda, ahí nos hemos visto, ahí nos hemos encontrado, ahí estamos. Es una gran riqueza pues, sin hacer pasos masónicos y esas cosas, nos reconocemos, hacemos la tarea. Es una felicidad que uno no puede dejar de lado: el trabajo conjunto, la voluntad de hacer, continuó el director fundador de este diario.
Carlos Payán |
apenas6 mil, pues perdió otra biblioteca de similares dimensiones en una inundación de su casa,
esto es lo que queda, pero debe ser la semilla para que lleguen otra donaciones e ir integrando poco a poco una biblioteca más amplia. Estos libros se refieren a México, hay algunas primeras ediciones, algunas ediciones facsimilares.
El antropólogo Héctor Díaz-Polanco, también vecino de Tlalpan, apuntó que aportará otros 2 mil ejemplares para fortalecer el acervo de su amigo, sobre todo en el área de las ciencias sociales, ya que la biblioteca del periodista es básicamente de historia, literatura y arte.
Se calcula que en unos seis meses concluirán los trabajos para
inaugurar la nueva biblioteca Payán, que será modelo para ese tipo de
instituciones públicas en la ciudad de México.
Carlos Payán Velver dijo sentirse orgulloso de haber participado en todas las
De México a España
El anuncio de la donación se hizo a unas cuantas horas de
la partida de Carlos Payán hacia España, donde tendrá por un tiempo su
lugar de residencia.
En el acto estuvieron presentes los titulares de las secretarías
capitalinas de Educación, Mara Robles, y Cultura, Eduardo Vázquez
Martín; el director del Fideicomiso del Centro Histórico, Inti Muñoz, y
el ex jefe delegacional de Tlalpan, Salvador Martínez della Rocca, quien
comentó: “Estamos tristes por su partida para irse a vivir a otro país,
por esta adolescentada, son sus palabras. Es una decisión de
su vida pero también tenemos derecho a decir que necesitamos a Payán
aquí, en estos momentos que estamos viendo en el país y que leemos todos
los días en La Jornada, en estos momentos de las autodefensas,
del crimen organizado, del narcotráfico, cuando tenemos más de 60
millones de pobres y todavía hay cretinos que dicen que somos la onceava
potencia del mundo; en estos momentos de los problemas de los niños y
niñas de la calle, donde los salarios son de hambre, cuando el año
pasado hubo 3 mil marchas en la ciudad, cuando hay muchos problemas que
no es que no se resuelvan, sino que no saben cómo resolver.En estos momentos nadie puede tener la menor duda de que una personalidad como Carlos Payán es muy necesaria aquí, pero estoy seguro de que esté donde esté va a estar presente en nuestra luchas y actividades.
Carlos Payán Velver dijo sentirse orgulloso de haber participado en todas las
pequeñas utopías. Cuando vino el derrumbe de las grandes, nos quedaron pocos espacios donde trabajar y hacer algo posible, en este país donde la izquierda anda toda en los sótanos, en los pantanos de no sé dónde. Las utopías no se pueden encontrar más que aquí, en esta línea, para hacer dos o tres cosas pequeñas o grandes como esto. Me siento muy contento. Espero verlos allá a todos. Ya me voy.